Lo malo era que en el fondo ella estaba bastante contenta de sentirse así, de no haber vuelto, de estar siempre de ida aunque no supiera a dónde..

miércoles, 20 de julio de 2011

Viviendo(te)

Te deje mis años de oro, oxidados, la mueca a la que me gustaba llamar sonrisa, el llanto al que apode costumbre, la risa que se ausentaba, esperando en un banco... Te deje el cuerpo, ese que de memoria, tan de memoria amabas. 
Te dejo el cielo azul, bobeda negra de las noches, y cada estrella, moribunda, parpadeando a los lejos.. esas que con los ojos cerrados mirabas.. 
Me las imagino crudas, estáticas, erráticas, les abres con el filo el corazón... y el pobre sístole se apaga. -solía ser una, muy enana, casi imperceptible..-
En el rincón de tu casa, ese donde el sol nunca se cuela,  te he colgado el amor mio, ajado, sudoroso y sucio, terrible, la facha se le cae a cada retazo, pero allí lo dejo, para que te acuerdes de mi.. para que sepas, que te colgué la hilacha, y partí con un traje nuevo, radiante, me queda perfecto, tiene flores y el viento lo hace bailar.. y es como un abrazo para mirar el cielo, azul. y brilla, ¡cuanto brilla! se iluminan las estatuas, parpadean, los peces duermen, y la noche se despierta, ella también tiene un vestido, le ha bordado pájaros que cantan y vuelan, banderas de arco iris, arboles, y una frescura que.. huele a limones...


Me robo el mar y la arena en tus pies, los ojos que gritaron paz, en tiempos de guerra, la tarde que corrí mientras inmóvil te miraba, los platillos que me preparabas, delicias agridulces.. te miro caminar de espaldas, y te pierdo cuando subes el atardecer, cuesta arriba, en esa linea eterna de nuestro horizonte... tu imagen se desdibuja.. tiembla con el calor del aire.. y te pierdo de vista.. y volví a nacer 

Nocturno

Tengo esta noche las manos negras, el corazón sudado
como después de luchar hasta el olvido con los ciempiés del humo.
Todo ha quedado allá, las botellas, el barco,
no sé si me querían, y si esperaban verme.
En el diario tirado sobre la cama dice encuentros diplomáticos,
una sangría exploratoria lo batió alegremente en cuatro sets.
Un bosque altísimo rodea esta casa en el centro de la ciudad,
yo sé, siento que un ciego está muriéndose en las cercanías.
Mi mujer sube y baja una pequeña escalera
como un capitán de navío que desconfía de las estrellas.
Hay una taza de leche, papeles, las once de la noche.
Afuera parece como si multitudes de caballos se acercaran
a la ventana que tengo a mi espalda.

domingo, 17 de julio de 2011

Mis monstruos simpáticos

Mis monstruos vienen marchando. Mis monstruos no son monstruos terroríficos, no trabajan en películas que asustan, no tienen en sus ojos venitas rosadas.
Mis monstruos son simpáticos, tienen un andar pesando, lento. Si te ven pasar por la calle, saludan, y si estas triste, puedes posarte en sus hombros y desde allí ver toda la ciudad. Algunos nostálgicos recurrentes, afirman haber tocado el cielo con las manos... yo creo que sí, esos monstruos lo hacen todo posible.
Hay gente que se espanta cuando le hablo de mis monstruos, porque no los ven, sólo los imaginan. Piensan en las bestias sin alma que devoran ojos y huesos. Pero mis monstruos no son así, ellos son simpáticos. Salen de adentro cuando se aburren de jugar ajedrez, de buscar estrategias para no perder, de leer periódicos con noticias viejas.. y cuando se despabilan, recorren la ciudad, alzando en hombros a esas mujeres, a los niños y los ancianos que tienen penas, siempre dicen que un poco de sol y cielo alivia el dolor, que los recuerdos se vuelven postales amarillas, y no te hablan, y no responden. Y las cartas de amor, se amigan con los cuentos de humor, y se abrazan y ríen.
Pero a veces, mis monstruos, se sienten cansados, se fatigan de tanto esperar, que alguien los posee en sus hombros y los saque a pasear, pero los monstruos son así, son simpáticos, y siempre están dispuestos, como el horizonte, a curar.


Los amantes





¿Quién los ve andar por la ciudad
si todos están ciegos ?
Ellos se toman de la mano: algo habla
entre sus dedos, lenguas dulces
lamen la húmeda palma, corren por las falanges,
y arriba está la noche llena de ojos.

Son los amantes, su isla flota a la deriva
hacia muertes de césped, hacia puertos
que se abren entre sábanas.

Todo se desordena a través de ellos,
                                                  todo encuentra su cifra escamoteada;
pero ellos ni siquiera saben
que mientras ruedan en su amarga arena
hay una pausa en la obra de la nada,
el tigre es un jardín que juega.


Amanece en los carros de basura,
empiezan a salir los ciegos,
el ministerio abre sus puertas.
Los amantes rendidos se miran y se tocan
una vez más antes de oler el día.

Ya están vestidos, ya se van por la calle.
Y es sólo entonces
cuando están muertos, cuando están vestidos,
que la ciudad los recupera hipócrita
y les impone los deberes cotidianos.

Al aire.

Un cronopio que baila tango 
hoy voy a inventar
-esta boca es mia, y de nadie mas-
rush, tabaco y cielo
pájaros en la cabeza
cronopio sin fama,
un pajaro en el balcón,
palabras como cuerpos
corazón sin sístole
instrucciones para amar
la tarde que cae a tu paso
la tarde que se levanta
cuando te ve regresar.

jueves, 7 de julio de 2011

Desarreglo de los sentidos.

No sabré desatarme los zapatos y dejar que la ciudad me muerda los pies,
no me emborracharé bajo los puentes, no cometeré faltas de estilo. 

Acepto este destino de camisas planchadas, llego a tiempo a los cines, cedo mi asiento a las señoras.

El largo desarreglo de los sentidos me va mal, opto
por el dentífrico y las toallas. Me vacuno. 
Mira qué pobre amante, incapaz de meterse en una fuente
para traerte un pescadito rojo
bajo la rabia de gendarmes y niñeras.  

Se me ocurre.

Se me ocurre que vas a llegar distinto 
no exactamente más lindo
ni más fuerte 
ni más docil 
ni más cauto
tan solo que vas a llegar distinto 
como si esta temporada de no verme 
te hubiera sorprendido a vos también 
quizá porque sabes 
cómo te pienso y te enumero

después de todo la nostalgia existe 
aunque no lloremos en los andenes fantasmales 
ni sobre las almohadas de candor 
ni bajo el cielo opaco

yo nostalgio 
tu nostalgias 
y cómo me revienta que ella nostalgie

tu rostro es la vanguardia 
tal vez llega primero 
porque lo pinto en las paredes 
con trazos invisibles y seguros

no olvides que tu rostro 
me mira como pueblo 
sonríe y rabia y canta 
como pueblo 
y eso te da una lumbre 
inapagable 
ahora no tengo dudas 
vas a llegar distinto y con señales 
con nuevas 
con hondura 
con franqueza

sé que voy a quererte sin preguntas ...
sé que vas a quererme sin respuestas ...


miércoles, 29 de junio de 2011

Objetos perdidos

Por veredas de sueño y habitaciones sordas
tus rendidos veranos me aceleran con sus cantos
Una cifra vigilante y sigilosa 
va por los arrabales llamándome y llamándome
pero qué falta, dime, en la tarjeta diminuta 
donde están tu nombre, tu calle y tu desvelo
si la cifra se mezcla con las letras del sueño,
si solamente estás donde ya no te busco.
Mendoza, Argentina 1944
La mufa



Vos ves la Cruz del Sur,
respirás el verano con su olor a duraznos,
y caminás de noche
mi pequeño fantasma silencioso
por ese Buenos Aires,
por ese siempre mismo Buenos Aires.
Quizá la más querida


Me diste la intemperie,

la leve sombra de tu mano
pasando por mi cara.
Me diste el frío, la distancia,

el amargo café de medianoche
entre mesas vacías.

Siempre empezó a llover
en la mitad de la película,
la flor que te llevé tenía
una araña esperando entre los pétalos.

Creo que lo sabías          
y que favoreciste la desgracia.
Siempre olvidé el paraguas
antes de ir a buscarte,

el restaurante estaba lleno
y voceaban la guerra en las esquinas.                         







Fui una letra de tango
para tu indiferente melodía.
Una carta de amor
Todo lo que de vos quisiera
es tan poco en el fondo
porque en el fondo es todo

como un perro que pasa, una colina,
esas cosas de nada, cotidianas,
espiga y cabellera y dos terrones,
el olor de tu cuerpo,
lo que decís de cualquier cosa,
conmigo o contra mía,
todo eso es tan poco
yo lo quiero de vos porque te quiero.

Que mires más allá de mí,
que me ames con violenta prescindencia
del mañana, que el grito
de tu entrega se estrelle
en la cara de un jefe de oficina,
y que el placer que juntos inventamos
sea otro signo de la libertad.




Y sin embargo.

De sobra sabes que eres la primera,
que no miento si juro que daría
por ti la vida entera,
por ti la vida entera;
y, sin embargo, un rato, cada día,
ya ves, te engañaría
con cualquiera,
te cambiaría por cualquiera.
Ni tan arrepentido ni encantado
de haberme conocido, lo confieso.
Tú que tanto has besado
tú que me has enseñado,
sabes mejor que yo que hasta los huesos
sólo calan los besos
que no has dado,
los labios del pecado.
Porque una casa sin ti es una emboscada,
el pasillo de un tren de madrugada,
un laberinto
sin luz ni vino tinto,
un velo de alquitrán en la mirada.
Y me envenenan los besos que voy dando
y, sin embargo, cuando
duermo sin ti contigo sueño,
y con todas si duermes a mi lado,
y si te vas me voy por los tejados
como un gato sin dueño
perdido en el pañuelo de amargura
que empaña sin mancharla tu hermosura.

No debería contarlo y, sin embargo,
cuando pido la llave de un hotel
y a media noche encargo
un buen champán francés
y cena con velitas para dos,
siempre es con otra, amor,
nunca contigo,

bien sabes lo que digo.
Porque una casa sin ti es una oficina,
un teléfono ardiendo en la cabina,
una palmera
en el museo de cera,
un éxodo de oscuras golondrinas.
Y cuando vuelves hay fiesta
en la cocina
y bailes sin orquesta
y ramos de rosas con espinas,
pero dos no es igual que uno más uno
y el lunes al café del desayuno
vuelve la guerra fría
y al cielo de tu boca el purgatorio
y al dormitorio
el pan de cada día.

lunes, 27 de junio de 2011

Lo que mucha gente.

"Lo que mucha gente llama amar consiste en elegir a una mujer y casarse con ella. La eligen, te lo juro, los he visto. Como si se pudiese elegir en el amor, como si no fuera un rayo que te parte los huesos y te deja estaqueado en la mitad del patio."

Uno puede reírse

"Y así uno puede reírse, 
y creer que no esta hablando en serio, 
pero si se esta hablando en serio,
la risa ella sola ha cavado mas túneles útiles
que todas las lágrimas de la tierra..."

Gato.

"... suelen
abrigarle el silencio
a las viudas
y estirarse en la alfombra
y bostezar
como si hubieran heredado
el sol
y dormir y dormir
arzobispales

y cazar una mosca
haciendo ochos..."

Barquito

‎"Decían que cada día el mar que veían sus ojos 
era diferente, 
que aunque su mundo estuviera contenido en no más de siete metros, 
su sueño era seguir comiéndoselo, 

que la aparente rutina que podía invadir sus días, 
se teñía de emoción cada minuto.
Allí, en aquel barquito sin mayor tecnología 
que la creada por sus propias manos, 
habían descubierto la libertad de vivir al son de las olas..."


jueves, 26 de mayo de 2011

Pájaros en la cabeza


No tenía tiempo para pensar...
En su cabellera brillante como el sol, 
un pájaro se posaba cada día
a canturrear 
Su corazón
en cada latido lo dibujaba
una y otra vez
a él
que supo enseñarle
la pequeña tarea
de abandonar su mente
y regalarle el alma
en cada abrazo
en cada mirada
cuando lo contemplaba
sin parpadear
cuando cerraba los ojos
para soñarlo....

y así
ella
aprendió
la inmensa tarea

de amar.....





A Diego.


Yo espero cualquier cosa de esta noche, 
hay como una atmósfera de fin del mundo...
... que ganas me vienen de contarte, que indiferente al invierno, me planto aquí en el árbol, ahora verde, que ni siquiera intento trepar.. Porque vivo en él, enredada en sus viejas ramas, rusticas y añejas, majestuosas, con aromas húmedos, verdes, y amarillos, con grietas de soledad, con sed, con vientos y lluvias, con pequeños insectos… dime ya.. hace falta más?

Año viejo, adiós

2010, año monumental, año calesita, saltos en largo, en ancho, al vacío y bien profundo. Bisagra entre esta vida que me acompaña y la vida que viví.
Con sumo cuidado embalé mis corazones, esos que laten conmigo, mi hogar y mis horizontes, y emprendí ese viaje que creo, llaman crecer.
En un bolsillo, mi corazón marchito, un verano fugaz e intenso, me falta el aire al sentir las distancias, me sobran kilómetros entre vos y yo.
En mi maleta mis sueños, y como un saco añejo, vos.. sobre las valijas repletas. Tardé mas de lo debido, pero fue en el momento justo, casi al desgarrarse por completo el alma. Aprendí recetas de cocina, recetas para amar, para olvidar, para extrañar, aprendí a caminar sola por donde nunca nadie se quiere asomar... y te solté, te empujé y cerré las puertas de nuestro armario, y me mudé de mundo, bienvenida la soledad, la bonita soledad que acompaña, acaricia, nostalgia y el bendito maldito olvido que se escurre por la persiana, el insomnio de tu ausencia en la almohada, tu pelo y tus manías.
Renací, de dónde no se, de donde siempre vuelvo y vuelvo... caricias que curan el alma, vestigios de tus ojos en mi, y las alas planean, y comencé a volar, sin caricias ajenas..
Descubrí la libertad que de brazos se me cruzaba, gritando con manos y ojos lo libre que era. 
Pensamientos que atraviesan fronteras, besos robados y de regalo, dos corazones, sensaciones que reconozco, en el alma y en el cuerpo una fiesta..
Adios año viejo, adios... 

Mira.



Mira, no pido mucho,
solamente tu mano, tenerla
como un sapito que duerme así contento.
Necesito esa puerta que me dabas
para entrar a tu mundo, ese trocito
de azúcar verde, de redondo alegre.
¿No me prestás tu mano en esta noche
de fìn de año de lechuzas roncas?
No puedes, por razones técnicas.
Entonces la tramo en el aire, urdiendo cada dedo,
el durazno sedoso de la palma
y el dorso, ese país de azules árboles.
Así la tomo y la sostengo,
como si de ello dependiera
muchísimo del mundo,
la sucesión de las cuatro estaciones,
el canto de los gallos, el amor de los hombres.

Es un viejo mar...

Quiero mi horizonte, esa linea infinita que recorre la distancia, el espacio entre el cielo y la tierra... 
Quiero los atarcedecer multicolores, anaranjados, azules y violetas... y los pajaros que cantan y trazan dibujos en el aire, la sombra de un caldén añoso, que se posa en el viento como una postal de tarde..
Quiero sus ojos verdes brillando, pequeñas esmeraldas como faros en la oscuridad..    
Y su sonrisa infinita, que deslumbra cada uno de mis pasos al andar.


De tu lado de la cordillera.

Me dejas el sol en los ojos, un atardecer que me ilumina la cara, 
y en el corazon, se me plantó un mar inmenso, 
que mueve el sistole al compas de las olas, 
y el diatole no me para de latir..


Se me pinta la piel de solo pensarlo... 
se me enrriedan los pies en la arena , 
y los ojos se me van lejos, 
recorren las curvas de esos serros que me hablan por ti. 


Me imagino el mar y me siento pequeña, 
quiero un mar donde el silencio navegue en barcos de papel, 
donde no importe ni como ni cuando, solo estar presentes...


El cielo que yo quiero tiene mil colores,  
matices violetas anaranjados y azules dan pinceladas inmensas, 
y tiñen la piel, se reflejan en los ojos, y del cielo se desprenden, 
la sal del mar deja huellitas en las pestañas, 
siluetas blancas en la arena, que el agua borra y vuelve a dibujar...


Puedo regalarte un amanecer, 
de esos que nacen del llano, 
y acarician los caldenes en primavera... 
a cambio del sol bostezando en el mar, 
cuando ya es hora de dormir... 


y la noche se posa en los hombros, 
y los amantes aman y odian, y vuelven a amar... 
Puedo regalarte un par de ojos sinceros 
y mis manos siempre tendidas,  
dedicarte mi mejor sonrisa, y darte flores para perfumar el aire. 


Puedo darte mi locura y algun enojo, 
puedo darte tanto aun sin tener nada... puedo...



El pajaro de plumas de flecos de lana

Un tango me late en la piel, en lo mas profundo baila desnudo, se desliza con manos y pies... acaricia el cielo razo y se convierte en cielo.. las flores del empapelado se me hacen ciertas, brotan de las paredes sus aromas.. el jasmin de mi abuelo.. las buenas noches de la madre de mi madre. Estallan colores, los veo crecer, dan un salto al vacio y mueren, y renacen, los amarillos se creen soles, los rojos sangre, el verde me respira fresco. Los azules tienen el ceño fruncido, y un celeste les da un susto, y sus ojos se distienden...
Me abanica con sus pestañas el pájaro de plumas .. 
de flecos de lana, tiene una mirada que hierve las aguas, tiene una mirada que duerme 
gigantes.. mira lejos, profundo.. se interna en los espacios vacíos,
 y los llena de pintitas de colores.. les da luz, abre las cortinas de la tarde,
 y el amanecer le ilumina la cara.. Brillan sus plumas doradas,

 y sus ojos limones..
Por la noche, cuando regresa de sus bailes de primavera, 
   toma té de manzanillas, con espuma de nueves,
 se le escurren en su majestuoso pico de madera, 
y su pajarita le sonrié, ella tiene espuma de té en el alma...
Cuando el farol de noche se planta, 
la luna se esmera por brillar mas.. 
y el pájaro, ave de libertad, 
se envuelve en las alas 
de su pajarita,
y si suspira, tiembla la noche,
 y si sueña, 

lo hace despierto...

Un cronopio disfrazado de flor

Un cronopio encuentra una flor
solitaria en medio de los campos.
Primero la va a arrancar,
pero piensa que es una crueldad inútil
y se pone de rodillas a su lado
y juega alegremente con la flor,
a saber:
le acaricia los pétalos,
la sopla para que baile,
zumba como una abeja,
huele su perfume,
y finalmente
se acuesta debajo de la flor
y se duerme
envuelto en una gran paz.


La flor piensa:
   
                       ''Es como una flor''.